Ayer desde las primeras horas de la mañana la casa estuvo algo convulsionada, los aullidos o gemidos de dolor por el inminente parto de la sucesora de Xica nos despertaron y ocuparon toda nuestra atención, mientras los chicos se dirigian al colegio mi señora y yo tratabamos de reconfortar y tranquilizar a nuestra primeriza doberman en su trabajo de parto, al rato se dirigió sola hacia un hueco hecho por ella misma con anterioridad en el jardín, ahí fue donde empezó a parir; uno, dos, tres, ... cinco, ...nueve, ..once y doce, si lector doce cachorros, todos vivos y en perfecto estado de salud. Todo el día, desde las nueve y media de la mañana hasta pasadas las siete de la noche estuvo alumbrando pero sobre todo sorprendiendonos, al medio día una conversación con el veterinario nos anticipo la posibilidad de un parto multiple importante así como la probable necesidad de eliminar algunos de los cachorros.
hoy un día después aún no salimos de nuestro asombro pero la posibilidad de eliminar crias ha sido desestimada después de las explicitas promesas de nuestros hijos para ayudar en la alimentación y cuidado de la extensa camada, ya anoche reubicamos en su casa a la nueva madre con las crias pero el trabajo de atención hacia los perros se multiplico en forma exponencial desde ayer.
hoy un día después aún no salimos de nuestro asombro pero la posibilidad de eliminar crias ha sido desestimada después de las explicitas promesas de nuestros hijos para ayudar en la alimentación y cuidado de la extensa camada, ya anoche reubicamos en su casa a la nueva madre con las crias pero el trabajo de atención hacia los perros se multiplico en forma exponencial desde ayer.
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