(Disculpandome por los horrores gramaticales propios de un aprendiz de escribidor)

jueves, 2 de octubre de 2008

60 (2)

Al sopesar ideas, evaluar planes o definir intenciones; al tomar decisiones y ejecutar proyectos siempre está presente el tema de la edad, a diferencia de años anteriores cuando ni siquiera tomaba en cuenta el peso de los años, hoy, esta cuestión prevalece, tiene preponderancia. A pesar de tener una salud relatívamente envidiable, vitalidad a la vista, un organismo sin mayores complicaciones, una remarcable confianza y mejores espectativas, siempre la longevidad se inmiscuye para corregir conceptos, cada vez, sin tapujos, domina los escenarios nuevos generando parámetros vinculados a esta variable, la importancia que tiene hoy la edad obliga a plantear cuestiones que en el pasado fueron desconocidas, ignoradas o símplemente desestimadas. Aprender a convivir bajo el manto de estas contemporaneas reglas implica reconocer nuestras actuales limitaciones, calcular con mayor detalle tanto plazos y tiempos de desarrollo como maduración de las metas estimadas, considerar con prolija precisión nuestros objetivos o evaluar mejor los alcances y posibilidades alternas, todo esto u otras adicionales apreciaciones mas. Hoy como nunca necesitamos saber o reconocer mejor quienes somos, en que estamos y adonde intentamos llegar, sin esas premisas podemos perder mucho mas de lo que arriesgamos o consideramos, ya sea en salud, dinero o sensibilidad.

Dedicación y esfuerzo, tesón mas voluntad es lo que un compañero de colegio, de promoción, debió realizar para volver a reunirnos, al lado de varios mas que le apoyaron logró volver a juntarnos, reagruparnos via internet para así recuperar o retomar el contacto que iniciamos en la edad escolar, con previo reconocimiento a su gestión, seguimos. Mas alla de la diaria satisfacción (o pesar) que sentimos al conocer las novedades de nuestros antiguos compañeros, por encima de los chistes, gráficos o "pastillas de entusiasmo" que ofrecen los archivos adjuntos está la percepción del estado de ánimo del grupo, en doble lectura se puede percibir la colectiva actitud o sentimiento de quienes en forma activa o eventual participan. Por lo pronto me queda claro que varios (como yo) tienen presente el tema de la edad, las puyas y sus respuestas, contrapuntos o hasta apanados verbales con frecuencia utilizan o hasta abusan de la materia indicada desnudando así lo que aparece bajo la imagen que ofrecemos, esa imperceptible preocupación por nuestra perdurabilidad.

El inicio de esta tercera etapa de nuestra vida nos pone como los alumnos de primeros grados, mostrando ansiedad, angustia, curiosidad o temor de lo que vendrá, que nos traerá en adelante la vida, que viene en el futuro próximo, sin embargo estoy seguro que a corto plazo (quizás otros ya lo hicieron) pasaremos la página, romperemos la vigente incertidumbre y seguiremos por la vida como si nada hubiera pasado. Felices sesenta, nuevos adultos mayores.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Carlos, el tema de la edad y el paso del tiempo es importante meditarlo en tanto uno entra a decadas que siempre son motivo de celebración (al estilo que uno desee por supuesto.
La atención que uno le dé y la intensidad de la misma permitirá manejar este punto, que a muchos y muchas llega a agobiar o tornarse una especie de crisis.
Sin embargo soy de las personas que piensan que la edad cronológica no es tan crucial como la edad del espíritu.

Saludoss y espero no estes en crisis de los 60 :-)

Carlos Caillaux dijo...

rbc, presumo que no, leiste, dije presumo, ¿eso hace hace fragil mi conjetura?; pienso como tu, la edad cronológica y espiritual no necesariamente coinciden y en lo particular siempre sentí ser mas joven de mi edad real sin embargo estos últimos tiempos limitaciones físicas ante diversos esfuerzos (de todo tipo) me hacen refrescar, aflorar el tema.

Saludos.

jenelvi dijo...

Hola muchachos, tengo una premisa tener la edad que se representa y nó la cronológica... al menos asi llevo mejor el peso de los años.
saluditos.

RBC dijo...

Es evidente que el cuerpo es una máquina que se desgasta con el paso del tiempo, pero una aceitadita de cuando en cuando no nos viene mal, aunque hay situaciones que son inevitables:)
Saludoss

Carlos Caillaux dijo...

rbc, en estos días hablar de Aceitadita suena un tanto sucio (por el asunto de corrupción en el gobierno), intuyo que la referencia alude a chequeos de salud y/o aventuras que te hacen sentir mas joven.

Saludos.

Anónimo dijo...

ja ja ja ni se me ocurrió esa asociación. Solo una visita al galeno, eso fue lo que quería sugerir.